La información que aquí presentamos está basada en el método del Padre Romano Zago. Este método consiste en un preparado de aloe, miel y una bebida alcohólica (que actúa como conservante y vasodilatador para mejorar la absorción). Este método sirve tanto para la prevención como para el tratamiento de la enfermedad.
Nadie puede asegurar el éxito de este tratamiento tanto con fines preventivos como terapéuticos ya que cada persona puede responder de manera diferente. No es la intención generar falsas expectativas. Pero tenemos la obligación de dar a conocer métodos naturales que ayuden a combatir esta enfermedad, poniendo a consideración de nuestros lectores esta información para que la utilicen con espíritu crítico, no como reemplazo de otras medicinas.
La variedad de aloe que debe usarse se conoce como “aloe arborescens” (es de hojas largas y finas de color verde oscuro, sin manchas blancas). Para su uso las plantas no deben estar contaminadas, deben ser de jardines puros (nunca de canteros de la vía pública), con por lo menos 4 años de antigüedad.
Su uso no tiene grandes contraindicaciones. En caso de causar diarreas o náuseas se debe comenzar con una ingesta de dosis muy pequeñas y luego ir incrementándolas. No está recomendado su uso durante el embarazo, tampoco para el caso de hemorroides o diarreas por sus propiedades laxantes y por la posibilidad de promover contracciones en el útero. El Padre Romano Zago advierte que no deben asustarnos posibles efectos secundarios ya que suponen la expulsión, la liberación completa de las sustancias impuras por parte de nuestro organismo. Cuando se producen, tienen una duración limitada, de uno a tres días como máximo.
Receta del Padre Romano Zago:
INGREDIENTES:
-400 gramos de hojas de Aloe vera /Aloe Arborescens (unas 4 hojas largas).
-Medio kilo de miel de abeja
-40-50 ml (unas 6 cucharadas) de bebida alcohólica blanca (aguardiente, coñac, whisky, etc.)
¿CÓMO SE PREPARA?
Se eliminan las espinas de los bordes de las hojas y el polvo depositado en ellas, utilizando un trapo seco o una esponja. Después se cortan a trozos las hojas (sin quitar la corteza) y se meten en la batidora junto a la miel y la bebida elegida. Se bate bien y el preparado está listo para su consumo.
No hay que filtrarlo, ni cocinarlo, sino sólo conservarlo con cuidado en la heladera dentro de un envase oscuro, bien cerrado.
Se toma durante 15 días y se descansa 10 días antes de volverlo a tomar. La dosis que aconseja el Padre consiste en la ingesta de una cucharada sopera media hora antes de cada una de las tres comidas principales. Se debe agitar bien el producto antes del uso. Una vez terminado el primer preparado (unos 15 días), se recomienda someterse a una visita médica para comprobar el estado de la enfermedad. Según sea el parecer del médico, después de una pausa de varios días, se puede repetir el ciclo del tratamiento.