La Virgen de Loreto es una advocación mariana, patrona de la aeronáutica. La devoción a la Virgen de Loreto se originó en el siglo XIII, cuando se dice que la casa donde nació la Virgen María fue trasladada de Nazaret a Tarseto (Dalmacia, Croacia) para protegerla de los musulmanes.
El nombre Loreto proviene de la palabra «Laurel», que en Italia se dice «Laureto». Loreto significa: rodeado de árboles de laurel.
Patrona de los aviadores, y de las fuerzas aéreas en países como Argentina y España, su festividad se celebra el 10 de diciembre.
En el norte de Italia hay un santuario mariano sumamente famoso, visitado continuamente por millares de peregrinos. Se llama la Casita de Nazaret en Loreto.
A este santuario han ido en peregrinación famosos santos. Por ej. San Carlos Borromeo, San Luis Gonzaga, Santa Teresita, San José Cupettino y San Juan Bosco.
Empezó a existir este santuario cuando los Cruzados tomaron a Jerusalén y hacia el año 1200 empezaron a llevar a Italia materiales de la Tierra Santa para construir una réplica o imitación de lo que pudo ser la casita de Jesús, José y María de Nazaret.
Cuando después de muchos viajes portando materiales lograron hacer una edificación parecida a la que pudo habitar la Sagrada Familia, comenzaron a invitar a los devotos a visitar aquel lugar sagrado y a honrar en él a la Madre de Dios.
Y, como sucede en los santuarios de todo el mundo, comenzaron a obrarse allí admirables milagros. Los santuarios son precisamente lugares donde Dios, misteriosamente, sin saber por qué, concede impresionantes favores a los que van allí a pedirle su ayuda. Quizás porque la fe del peregrino es muy viva y se aumenta con el contagio del fervor de los demás orantes en ese lugar, en cada santuario se consiguen gracias que en otras partes no se habían logrado obtener. Y esto sucede en Loreto continuamente.
Durante la Edad Media llegaron a afirmar que esa construcción había sido llevada por los ángeles, volando por los aires, desde Nazaret. Por eso la Virgen de Loreto es Patrona de los aviadores.
Según una antigua tradición, la Santa Casa de Loreto -una pequeña y rústica vivienda- es la casa de Nazaret en la que vivió la Virgen María. Allí, la Madre de Dios recibió el anuncio del Ángel Gabriel, concibió del Espíritu Santo y, después de estos acontecimientos, vivió junto a Jesús y San José.
Esa misma tradición afirma que la casa habría llegado a Loreto, Marca de Ancona (Italia), desplazándose milagrosamente desde Tierra Santa (Palestina) -razón por la cual a este milagro se le denomina “traslación”-. La Santa Casa, como se le llama habitualmente, estuvo dividida originalmente en dos partes: una pequeña gruta y, al lado, la estructura principal, hecha de bloques o ladrillos. Hoy se encuentra protegida por una cripta marmoleada dentro del Santuario de Nuestra Señora de Loreto (Basílica de Nuestra Señora de Loreto).
El milagro: la casa de la Virgen, de Palestina a Loreto
En 1291 los sarracenos conquistaron Tierra Santa con la pretensión de destruir los lugares sagrados del cristianismo. Desde su punto de vista, una vez que se cumpliera ese objetivo, los cristianos ya no podrían celebrar más los misterios de la vida de Cristo.
Para ese entonces, una basílica se erigía sobre la Casa de Nazaret. Esta servía de protección para los restos de la pequeña casa de la Sagrada Familia. La basílica ya había sido reconstruida hasta en dos oportunidades -en 1090 y en 1263-, mientras que la casa permanecía intacta en su interior. Después del ataque sarraceno de 1291, los cruzados no pudieron volver a reconstruir la basílica y el hogar de María quedó desprotegido. Los cristianos pensaron que sucedería lo peor, es decir, que la casa sería destruída.
Mientras los cruzados terminaban por ser diezmados y perdían todo control sobre Tierra Santa, el Señor envió a sus ángeles para que movieran la casa a un lugar seguro. El 12 de mayo de 1291, los ángeles la trasladaron a un poblado llamado Tersatto, en Croacia, sorprendiendo a los habitantes que no podían explicar cómo había llegado la sencilla construcción a ese lugar. En el interior de la edificación se encontró un altar de piedra y, sobre este, una estatua de cedro de la Virgen María con el niño Jesús en brazos. El niño aparecía llevando en su mano izquierda una esfera de oro representando al mundo, con dos dedos de la mano derecha extendidos, como quien imparte la bendición.
Días después de la aparición de la casa, la Virgen se le apareció a un sacerdote del lugar y le reveló cuál era la procedencia de la edificación. María le dijo: «Debes saber que la casa que recientemente fue traída a tu tierra es la misma casa en la cual yo nací y crecí. Aquí fue la Anunciación del Arcángel Gabriel y aquí yo concebí al Creador de todas las cosas. Aquí, el Verbo se hizo carne… El altar que fue trasladado con la casa fue consagrado por Pedro, el Príncipe de los Apóstoles. Esta casa ha venido de Nazaret a tu tierra por el poder de Dios, para el cual nada es imposible”. El sacerdote, que había estado enfermo por mucho tiempo, se curó súbitamente. Comunicado el portento, comenzaron las peregrinaciones al lugar.
El 10 de diciembre de 1294, tres años y cinco meses después de los sucesos, la casa desapareció de Tersatto. Lejos de allí, en Loreto, Italia, unos pastores decían haber visto una casa volando sobre el mar, sostenida por unos ángeles, encabezados por San Miguel. Sobre ella creían haber visto a Jesús niño, cargado en brazos de la Virgen María. Numerosos testimonios, provenientes de otros lugares, también daban cuenta de que “una casa” iba cambiando de lugar misteriosamente. Se dice que primero estuvo en Banderuola, Porto Recanati, al noreste de Roma; y después fue vista en dirección hacia Loreto: primero, en medio de una finca, luego sobre una montaña. Finalmente apareció a las puertas de Loreto, al lado del camino, donde ha permanecido por más de 700 años.
Dos años después de la llegada de la casa a Loreto, la Virgen se apareció a un ermitaño de nombre Pablo, que vivía en las cercanías, a quien le reveló el origen e historia de la casa. Enteradas las autoridades eclesiásticas del milagro, quisieron corroborar el testimonio del monje y enviaron emisarios desde Loreto a Tersatto para hacer averiguaciones. Allí los emisarios quedaron sorprendidos cuando encontraron una réplica de la casa que había aparecido en Loreto, incluso de las mismas proporciones, pero que había sido construida por los lugareños para reemplazar a la casa original que alguna vez estuvo allí.
Este relato fue cobrando mayor fuerza con los años, en la medida en que cada vez eran más los viajeros que afirmaban que la Casa de Loreto era exactamente igual a la que se había venerado por siglos en Tierra Santa.
En Argentina, la Virgen de Loreto es la patrona de la Fuerza Aérea Argentina y de la aviación en general. En la Fuerza Aérea Argentina, se la considera la madre y protectora de las «Alas de la Patria».
En América, los Jesuitas introdujeron la devoción a la Virgen de Loreto, y en Buenos Aires nombraron así al primer colegio. También se le dio este nombre al Seminario de Córdoba y a una Misión en la actual provincia de Misiones.
«La Santa Casa de Loreto nos recuerda que, estemos donde estemos, tenemos un hogar que guarda nuestras raíces cristianas; y tenemos una Madre que vela por nosotros. El hogar es la Iglesia y la Madre es María. De ella aprendemos sobre todo la humildad, que es el camino del Cielo», señaló el Papa el 10 de diciembre de 2021.
Oraciones
Oración a Nuestra Señora de Loreto
¡Virgen de Loreto! ¡Madre Inmaculada! seas por los siglos bendita y alabada con fe y esperanza a ti acudimos, pues en tu ayuda con confianza creemos.
¡Oh misericordiosa Virgen de Loreto, excelsa abogada y protectora de los hogares danos paz, danos felicidad, alivia nuestras penas y necesidades, líbranos de enemigos, aleja de nosotros los males.
Virgen Santa de Loreto, nos ponemos bajo tu manto esperando amparo, derrama sobre nuestras familias, tu santísima bendición y aparta de nuestras almas, de nuestros hogares, las divisiones, los conflictos y tensiones para que el amor reine siempre entre nosotros.
Cuida de nosotros, Santa Madre, en unión de tu amado Hijo y de tu santo esposo José, concédenos a todos salud, paz y contento enséñanos a vivir con armonía y haznos capaces, con tu auxilio y benignidad, de encontrar los recursos necesarios para que nunca nos falte techo y sustento, haz que se respire paz y armonía, y que siempre exista bienestar y prosperidad.
Piadosísima Virgen de Loreto, por la gracia y bendición que el Padre Eterno te otorgó hoy te pedimos ayuda espiritual y material, en especial te solicitamos:
(hacer la petición)
Infunde caridad en nuestros corazones para que sea ella la que rija nuestras obras y acciones, guíanos con mano maternal y vela por tus hijos, y haz que nuestra casa sea una morada de paz protegida por ti y bendecida por el Señor. Te lo pedimos por tu Hijo Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Otra oración a la Virgen de Loreto
¡Reina y Madre de Loreto!
Bendice a tus hijos,
Cobija bajo tu manto a esta Iglesia.
Que sea sumisa en la integridad de la fe,
y fiel en el cumplimiento de sus deberes.
Guíanos a Cristo, para que sea
nuestra luz, nuestra verdad y
nuestro camino hacia Dios Padre.
Reina y Madre de Loreto,
nuestra Patrona, ruega por nosotros. Amén.