Por Sathya Sai Baba
Estoy muy feliz de estar en la Región de Punjab, la cual se ha ganado el respeto y la gratitud de la nación entera, por su heroísmo y sacrificio, por defender al país. Es una tierra sagrada y, a pesar de que Mi visita a este lugar fue planeada hace mucho tiempo, finalmente llegó el momento y aquí estoy. A una fruta le lleva mucho tiempo madurar y llenarse de dulce jugo.
Esta nación ha sembrado semillas de tolerancia y amistad entre todas las personas del mundo durante siglos. Ha conducido al mundo tanto en el progreso material como espiritual. Ha estado enfatizando la necesidad fundamental del hombre, comprenderse a sí mismo antes de intentar comprender a otros. Si no conocen vuestra posición en el Universo, vuestro destino y vuestro futuro, ¿de qué sirve deambular por el espacio? Permítanme decirles cuál es la verdadera naturaleza del hombre, así pueden realizar un esfuerzo supremo para protegerla y desarrollarla.
La Verdad es la naturaleza del hombre; ser falso es ser desleal a la naturaleza de uno. El Dharma (acción correcta) es la aplicación práctica en la vida real de la Verdad. Shanti (paz) es el resultado del Dharma, y Prema (amor) es el resplandor de Shanti.
La devoción no debería ser confinada a las cuatro paredes de la sala de santuario o a los cinco minutos en los cuales llevan a cabo Dhyana (meditación). Es un Sadhana (disciplina espiritual) de tiempo completo. Vuestra devoción ha de ser expresada como adoración a cada uno como una encarnación viviente de la Divinidad. Vean a Dios en cada uno, incluso en las personas a quienes ustedes ven como vuestros enemigos.
Practiquen esta clase de Amor vasto, inclusivo. ¿Cómo pueden obtener felicidad mostrando amor y reverencia a una estatuilla de piedra, que no responde ni refleja los sentimientos? Los seres vivos les devolverán aprecio y gratitud y les desearán buena suerte. Pueden ver alegría surgiendo en sus rostros. Esto les dará satisfacción a ustedes. Si no pueden educarse a sí mismos, amar a vuestros semejantes, ¿cómo pueden seguir el sendero de la dedicación a Dios?
Compartan vuestras alegrías y tristezas con otros.
Averigüen las dificultades y los problemas que otros están pasando y ayúdenlos, en la medida en que puedan, a salir de ellos, y a que conduzcan sus vidas de una manera tal que no vuelvan a ocurrir. Aprendan a vivir con otros hombres; compartan vuestras alegrías y pesares; sean benignos, no dominantes.
Cuando vivan juntos en amistad, el pueblo estará feliz y seguro; y, cuando los pueblos estén así bien unidos y fuertes, el Estado también será fuerte e inexpugnable. Los celos, la ira, el odio y la codicia desintegrarán al Estado y lo harán caer en desorden y angustia.
Ahuyenten las fuerzas divisorias que mantienen al hombre separado del hombre y evitan la cordial cooperación y la ayuda mutua. Punjab ganó una fama especial en nuestro país debido al valor de su gente. Deseo y bendigo que sea igualmente famosa por el valor Adhyathmic (espiritual). Inculquen la disciplina también en el campo del Sadhana e insistan a las personas que cumplan su deber con ellos mismos y con su destino. La devoción es como la cabeza; el deber es el tronco; la disciplina es los pies. Dejen que la devoción esté unida al deber y dirigida por la disciplina; entonces, el éxito es indudable.
La vida del hombre no debería ser un círculo derrochador de comer, beber y dormir; el hombre tiene el Athma (alma) como su realidad y, por eso, debe aprender a hacerse consciente de esa indefectible fuente de Bienaventuranza. Mediante el uso adecuado de su inteligencia, el hombre puede hacer uso de ese manantial y ser supremamente venturoso. La felicidad puede ser ganada sólo avanzando hacia Dios, no siguiendo los impulsos de los sentidos.
Este día, la felicidad también se elevó con el alba y la salida del sol en esta ciudad. La profundidad de vuestra devoción puede ser claramente medida por vuestros rostros. Durante muchas largas horas han estado aguardando la dicha de este momento; eso en sí mismo prueba que los asuntos del espíritu son más atractivos para ustedes que muchas cosas materiales y comodidades.
De las veinticuatro horas que se encuentran disponibles para ustedes cada día, permítanme aconsejarles que dediquen una pequeña fracción a la meditación u oraciones o a la lectura de sagradas escrituras, o a escuchar discursos sobre las leelas (juego divino) del Señor. Piensen en Dios y la gratitud que le deben a Él por la vida humana. Él los ha dotado con los diferentes talentos materiales, morales e intelectuales. Él los ha dotado con ello; hagan esto antes de comenzar cualquier tarea o actividad. Con seguridad que tendrán paz, dicha y éxito en vuestros emprendimientos a través de la Gracia Divina.
No se descorazonen si no progresan en la meditación. Pronuncien el Nombre del Señor, insistiendo en la Gloria y la Gracia; eso es igualmente efectivo. No es necesario ningún Nombre en particular; todos los nombres denotan sólo al Único. La firmeza, la fe, el amor que cultivan en el corazón y expresan a través de vuestras palabras, acciones y pensamientos, son los requisitos esenciales para ganar la Gracia de Dios.
Realicen vuestros bhajans (cantos grupales), realicen vuestras puujas (adoración externa), pero cuando ingresen a la sociedad, reconozcan a la sociedad como una forma de Dios, reconozcan lo que existe como Omnipresencia en la sociedad y adquieran de esta manera buenas cualidades en el servicio a la sociedad.
Olviden las agitaciones en el mundo. Entonces pueden tener paz, alegría y bienaventuranza.
Si desarrollan la idea de que Dios, quien es Omnipresente y está en toda la creación y el universo, se limita a un retrato que tiene tres pulgadas por cuatro pulgadas, están reduciendo vuestra concepción de Dios.
Sri Sathya Sai
Discurso dado por Sathya Sai Baba en Mogha (Punjab), 16/3/1973.