Una acción constante del Espíritu Santo se ha manifestado en el santuario mariano de Velankanni en la India, con una enorme afluencia de peregrinos. Allí se encuentra el santuario de Nuestra Señora de la Salud, el más importante de la India.
Millones de peregrinos que viajan hasta Thanjavur, Chennai, movidos por la fe, y los numerosos frutos espirituales que se producen en el Santuario, los que dan testimonio de la acción constante del Espíritu Santo en el lugar.
Muchos peregrinos no cristianos que acuden en busca de consuelo se hacen eco de testimonios similares. Algunos de ellos se curan de sus enfermedades y muchos encuentran paz y esperanza. Sin duda, el Espíritu Santo actúa también en ellos, respondiendo a la intercesión de María.
La devoción mariana en el Santuario de Nuestra Señora de la Salud de Velankani tiene su origen en unas apariciones de la Virgen María a niños pobres y enfermos en el siglo XVI. Se recuerda en especial el encuentro con un niño que ofreció a la Virgen la leche que llevaba para que pudiera alimentar al Niño que ella llevaba en brazos.
Historia y milagros
Vailankanni está considerada como la aparición de Lourdes de Oriente. En el siglo XVI un niño hindú llevaba leche a la casa de un cliente. Mientras descansaba bajo un árbol en el camino, la Virgen se le apareció y le pidió leche para su Hijo que llevaba en brazos. Al llegar a la casa del señor pidió disculpas por su tardanza y por la reducida cantidad de leche. Pero el cliente descubrió que no faltaba leche y comprendió que había ocurrido un milagro. El señor, también hindú, quiso ver el lugar de la aparición. Cuando llegaron, nuestra señora volvió a aparecerse ante ellos.
Un siglo más tarde, la devoción de unos marineros portugueses hizo que pudieran salvarse de una brutal tormenta. Agradecidos al sentirse protegidos por la Virgen María, construyeron una capilla en el lugar de mayor consistencia que la preexistente de techo de paja y la dedicaron el día 8 de septiembre, fiesta del nacimiento de la Virgen.
En el tsunami del océano Índico en 2004, las aguas destructoras no dañaron la iglesia. El día del maremoto, unos 2000 peregrinos participaban en la Misa y, mientras otros edificios al nivel del mar más lejanos quedaron totalmente destruidos, el agua no alcanzó el templo.
Esta acción sobrenatural entre los no católicos, no debe considerarse como una forma de sincretismo o mezcla de religiones. El Santuario es un lugar donde se manifiesta la cercanía de María, que acoge a todos y demuestra el amor del Señor a quienes la contemplan.
El Papa Francisco ha hecho saber que “le importa mucho la piedad de los fieles peregrinos, porque refleja la belleza de la Iglesia en salida que busca a Jesús en los brazos de María y confía su dolor y su esperanza al corazón de Su Madre”, también ha expresado “el gran aprecio que siente por este lugar de fe”.
En todo el mundo, millones de personas obtienen la ayuda de Nuestra Señora de la Buena Salud para pedir a Nuestro Señor Jesucristo su pronta recuperación.
Oración a la Virgen de Velankanni
¡Oh María! Nuestra Madre de la Salud y nuestra Reina Celestial,
sentada en tu trono de misericordia y compasión en tu Santuario Sagrado en Velankanni,
te alabamos y honramos para que seas nuestro refugio y nuestro alivio.
Innumerables son los enfermos que han recobrado la salud por tu intercesión.
Confiados en tu poder y bondad, venimos a ti y te suplicamos que sane nuestras enfermedades
y que obtenga para nosotros perfecta salud del cuerpo y del alma,
para que podamos servirte mejor a ti y a tu divino Hijo.
En todo tiempo has sido ayuda y consuelo de los enfermos.
Obtienes para ellos la salud cuando es conducente a su salvación.
Los asistes en el momento de su muerte.
Ayúdanos, pues, oh Madre amantísima, y obtén para nosotros cura de todos nuestros sufrimientos,
o paciencia para soportarlos con espíritu de resignación conforme a la Santa Voluntad de Dios,
para que todos nuestros las pruebas y los sufrimientos pueden ayudar
a purificar nuestras almas y ayudarnos a desprendernos de todos los lazos terrenales.
Amén
Novena a la Virgen de Velankanni
Fuiste elegida por la Santísima Trinidad para toda la eternidad entre las más puras vírgenes, para ser la Madre de Jesús.
Permitidle a vuestro humilde y devoto servidor, recordar el regalo de la Encarnación y el de poder llevar a Jesús en tu seno durante los nueve meses.
Oh Madre, deseo incrementar ese regalo con mis oraciones.
Oh querida Madre de los Afligidos, deseo que intercedas por mis intenciones ante tu Hijo Jesucristo.
Así se lo prometiste a todos aquellos que devotamente conmemoráramos ese inigualable regalo.Intenciones personales. Deseo con esta novena que ofrezco en tu honor, las intenciones que te he confiado
Nueve Ave Marías
acepta este saludo con el respecto y veneración con que el Arcángel Gabriel te saludó: La llena de Gracia ante Dios.
